AZÚCAR Y SAL
Tendido espero,
ya sé que queriéndola me fío
de pernoctar al lado de la vida,
con lo poco que soy
y lo poco que he sido,
que ella me da sin que le pida nada,
ay, agua que me limpia las heridas,
y esa sal que precisan hoy mis viandas,
y el azúcar cernida,
para endulzar mi pasión,
y dotar de emoción
al alma mía
Desnudo duermo
impávido y amado,
por lo que sé que es ella
que ya tiene lugar donde yo vivo,
espírituosos talantes creo a tientas
y los coloco vivos y ordenados,
donde buscan sus manos y sus ojos
lo que debe quedar en la despensa,
y le doy simplemente lo que trae,
que es mi vigor congraciado con lo suyo,
terminamos sirviéndonos los dos
para ser solo uno
Ay, bosquejo
que pintamos a dos manos,
cómo cambias al paso de las horas,
con la fe que entre tanto se me escapa,
pulo trazos que se quedaron empezados,
y ella llega a la noche ya cansada,
y con solo mirar sin un reproche,
deja completa toda la pintura,
mercedes tiene claras su hermosura,
que la estampa que soy en la mañana,
a la noche es perfecta,
cuando duermo a su lado sin mi miedo,
por obra de la magia que ella tiene,
una obra feliz de arte sincero,
a su cuerpo de maga más se aferra
y con un calor igual de fuerte y puro
en palabra textual
dice te quiero
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
• Copyright ©
Profundo poema, sensual y lleno de un erotismo expresado con una elegancia como tú sabes escribirlo, excelente, un abrazo querido y maravilloso poeta.
ResponderEliminar...dejaré como ahorro los que vengan...gracias Loly, te doy mi abrazo...
Eliminar