SACRILEGIOS
En la sacrílega noción de los bastardos
que no por viles sino por errados
es el amor sustituto y herramienta
quedo colgada de algún perno extraño
pendiendo sobre un vacío ya conocido
que desde el fondo de su abismo salado
grita un nombre que habita mi olvido…
y yo, que de ello entiendo poco, me asusto
porque no sé ser de otra manera
así, como se ve, escondiendo la mitad a veces,
doblando siempre la tenaz apuesta
como ese cruzado que batalla sin saberlo
por lograr un grial repleto de blasfemias,
sin nada que ganar y perdiendo aun menos
pues lo valioso lo dejó bien guardado
en un sagrado cairel de otro espacio
allí mismo donde tus labios se encuentran…
Y qué si de tus ojos me hago
como la única guía certera
de estos pies que recorrieron tanto
hasta llegar a este virgen remanso
donde es tu agua cristalina
fresca cura para cada herida…
y qué si en la profilaxis de tu abrazo
que se extiende omnipresente en mi día
es donde me siento segura y dichosa…
si yo no sé del amor sacrílego ni del otro
y sin embargo, de esta forma turbadora,
santa y sacrílegamente te amo….
CARMEN SORIANO
Derechos Registrados
Vuelvo seguro sobre mis pasos mejor dados, reviso el aire, mi enmienda de calor hace que el vaho de tu fiel respiración se vea pleno, sobre el cristal de la ventana en que otra vez me viste, odalisca de frambuesas y alelíes, sobre el sendero tu pie tibio me llama, como estas letras a los verbos míos..............
ResponderEliminar...de la recíproca obligación consentida de llamarnos al verbo mutuamente, como de exprimir una naranja madura, se obtiene de cualquier modo ese refresco que calma, alivia y sacia las sedes por tanta sal provocadas, por tanta soledad inextinta, por tanto concepto malentendido, gracias amor por cada minuto que me dejas serme...
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