NOCTURNO
Lo que no quieras que nazca
no lo siembres,
que de tu mano entre yemas no florece
aquel prudente gesto que elocuente,
tomó vida de ti para dejarla,
en fértil tierra, de llano o de montaña,
como ésta que traigo entre las uñas,
tañida en nueve lunas
con mis dedos de alianzas silenciosas,
entre ojos, miradas, noche, día,
perfume de jazmín y de ambrosías,
que ruedan como aceite por tu piel
y esa muralla ociosa por perfecta,
que duerme y se despierta
cubriendo esa tu espalda
sudorosa
Lo que quieras que eterno permanezca,
lábralo con tu letra cuneiforme
en haikús implorantes, delicados,
que podamos versar en cualquier lado,
de la frente hasta el pie que ama el camino,
de la mano que tuerce su destino
para buscar la grieta que invisible,
nos mira desde el fondo de la estancia,
a tus loables labranzas y a mis cayos,
que viven mortalmente separados,
con guerras prometidas a terceros,
que no han aparecido en nuestras vidas
Lo que desees pídeme sin dudas
te suplico mujer ahora a oscuras,
mientras lento jadeas y me inundas
con tu terca manera de dar todo,
como lo hace un molino dedicado,
las aspas asombrosas y pendientes
abiertas sin temor
hacia los lados,
el universo teme que establezcas
un confín de otro nombre con tus manos,
que agitas como amo de la orquesta,
tu tomas tanto aire por la boca,
que el cuarto sin oxigeno se queda,
tu tomas tanto aire por la boca,
que el cuarto sin oxigeno se queda,
golosa sin medir ni dar prestado,
tu sexo es como un fuelle acalorado,
quemado por el centro y por los lados,
y yo pieza de vidrio
que se forma,
un momento me exalto como ala,
creo que nace un vuelo y no soy nada,
mancorna de tu pulso que se rompe,
arena presa en ti,
en fiel minuto,
mirada que se cierra
si la encierras
en tu beso final
cruel atributo,
llamado para que entre la fatiga
y nos deje tendidos en el lecho
respirando el milagro de saber
que aun nos queda vigor
por deshacer...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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uy, qué imagen... hay ciertos haikús que has ido acumulando para tu propio uso,
ResponderEliminarcontundente y sorprendente este "nocturno".
abrazos, Ro
Sudor sobre tu espalda, que el viento rutinario solo ve diciéndole, a tu oído, que ya es inútil lastimar al frío, con el poco de calor que te dejé...Retozo, por tu piel Rocío, hago un lazo que dure una maroma, luego digo para mi las oraciones, y recuesto la cabeza cansada en el lecho caliente por presencia amiga...Todos los abrazos para ti, querida...gracias por venir...
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