TACTO
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No sereno señor,
el sentimiento mixto
de alma y cuerpo,
vasallo superior
pero no dueño de las llaves,
con su gesto de adusto destinado,
medrando calvarios ancestrales,
deseo,
no sereno señor,
que andas por inmensas oquedades,
para llenar con vacíos
tus cien llenos,
no sereno señor amigo de las claves
y de encontrar todos los intentos
para lograr llegar a la serena fuente
de los males que bautizan nuestros ojos
del capricho ferviente de la carne,
tan buena, tan fresca...
Piernas, dádivas, ojos,
playas de crestas y de olas,
ensaladas en gemelas copas,
abrazos de secreta enredadera
en corrales sin nombre ni habitante,
pubis que crecen y desfloran
en el aire las voces apagadas
y distantes,
entelequias
de deidades crónicas...
que amaron nuestros dedos
en búsquedas de anciano adolescente,
guerra abierta de un solo soldado
cuando mucho...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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CAUDAL ENTRE INDICE Y PULGAR: Por mucho que se esfuerce tu deseo, soldado inquieto, la fortaleza de la dama abre las almenas a su antojo, cuando quiera, pues esperan que adivines sus cesuras sin una luz que acompañe la fortuna. Búsqueda de manantial sereno que a veces se encuentra en el recodo de un desierto pero falta al fuego de la hoguera apilada con palabras,o de astillas hechas verso.
ResponderEliminarEs cierto, es verdad, que de ella es el confín, el levadizo puente del alminar, la ventana, el pan y el catalejo, y el poeta solo tiene a la palabra como bien desparejo... Gracias Fernando, por venir hasta la página, sabes que eres bienvenido... Un abrazo..
EliminarCuando mucho... la guerra está abierta y eso ya es mucho para tanto sentimiento.
ResponderEliminarUn placer leerte José, mil gracias por la vista!
Bella noche.
Pero al contrario Cristina, siempre mil gracias a ti!! .te acerco mi abrazo...
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