DORMIDA
Comandando tu sueño
están tus ojos,
lastrados por extenuantes laboreos,
los diarios, los que estaban atrasados,
aquellos que por ajenos preocupan,
y los otros que yo he bautizado
tareas sin hacer que nadie hizo,
y que esclavos nos llevan sometidos,
con números quebrados que no lo eran
pero por ir enteros adeudados,
nadie quiere cogerlos,
mucho menos sumarlos
o restarlos...
Cansada de tragedias que ahora pasan
como si fuera una película incesante,
donde protagonistas piel y sangre,
chocan contra la pálida conciencia
produciendo callada incontinencia
en ardorosa batalla entre los ojos,
que están por tanto duelo compungidos
sin poder desandar nieblas del alma,
mientras la sangre de otros salta augusta
en bombazos elocuentes y metralla,
que no sabes mirar menos doler,
igual que a mi me pasa,
un quehacer
para quedar dolido muchos días...
Reverbera tu mente ahora dormida,
y te veo temblar como una hoja,
escojo a una simbólica palmera
para que haga por sí misma de remedo
tejiendo imaginarios sortilegios,
por cada quehacer que aún no completas,
para nutrirla sincera con su paga,
cuando el viento sonara cada hebra
y al suelo descendieran los denarios,
tu preocupación terminaría...
así cada persona laboriosa
inscrita con su esfuerzo entre las hojas,
vería recompensas descender
al hermoso azogue de los vientos,
cayendo como agua hasta la tierra,
no en números quebrados ni romanos,
tampoco a la derecha o a la izquierda,
sino como plomada que perfecta,
en la arena sin mancha señalara
qué paga corresponde
y quién es dueña...
No tendrías el sueño tembloroso,
que hoy tienes mientras duermes preocupada,
descansarías ajena al ministerio
que te espera fatigoso en las jornadas,
que no señalan aún el calendario
aunque dolor promete en su breviario,
de tu sueño y mi vigilia conocido,
que dice a tu labor fuerte y granada
no vendrá esa paga justa y noble,
sino la únicamente necesaria
para alargar la vida,
mi señora,
y el sueño de llegar a mejor parte
mantener con vida,
sin saber
que lugar en el mapa
ha de tener...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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