CENICIENTOS
Lavo mis manos en mi carne agria,
doce de las trece veces que me miras
y luego de marcharme vuelvo limpio,
de todo lo que dí sin tú pedirlo,
que es la era mayor donde yo siembro
como pobre inquilino tu inquietud,
los veinte besos laxos, recelosos,
y el coito alargado que llevamos,
como un niño pequeño entre las manos,
desde el principio tímido hasta aquí,
esta puerta de vidrio,
donde puedes mirarme
y yo a ti...
Tengo pena de hablar solo hacia adentro
como chico vulgar poco educado,
sí sabes que mirar hacia otro lado
produce refracción ambulatoria
porque no me regalas esa gloria
de habitarme, mujer, de encalambrar
mis sures y mis nortes nuevamente,
y restregarte a mi pilar egregio,
con la fuerza de aquel que está perdido,
y no quiere volver o regresar
a ser ese que dejó en algún lugar,
con su nombre escrito en un papel
y un vidrio enterrado en las costillas
por no saber amar,
solo gastarse atado
en otra piel...
JOSÉ IGNACIO RESTREPO
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Oídos.., hay quienes saen escuchar... y diapuestos, reciben tu palabra, confiados en recolectar y desgustar la mejor uva.... Bellísimo José Ignacio... eterno
ResponderEliminarEl mejor de los vinos es aquel, que nos halla dispuestos, ataviados de cuerpo y corazón para dar lo que somos, compartirlo...como hoy...Y te vienes, luciérnaga precoz, Isabel de los tragos y los versos, a abrazar lo que deja en mi la noche, su aluvión de consejas y reproches, adheridos al vientre de ilusiones, de recuerdos, de respiración...Cuánta gracia en tu voz, eternas gracias....abrazos amiga del alma...
Eliminar"veinte besos laxos,recelosos".....como alfombra para tu prodigioso cuerpo de esquinas resbalosas y trémulas.....acucia mis sentidos..promueve en mí.....vértigo intrépido....que emociona...place....y...demanda..placer infinito. Muy bonito JI
ResponderEliminarCuando vienes amigo, y me dejas tus voces como flores, me reprendo de ácidos olvidos, y me visto de ellas..me quedo con tu aroma querido, y lo extiendo en colores que vendrán, en voces como arpegios...gracias Marcos por venir, te extiendo mi abraso...
Eliminar´...é angustiante la soledad y la saudade de un "verbo" irregular, como este Poema que no conjuga con su esencia tan pura, tan "puerta de vidrio"..y .pesan en lo pecho los sentimientos con las milles de tonalidades de la puesta del astro rey, desde que irrompe su nacer....en lo Poema se senten las regularidades a lo alcanze curto (?) de la voz y las irregularidades del silencio aun más curto, que tanto tiene a decir,....comovente y brillante !!!!´...é angustiante la soledad y la saudade de un "verbo" irregular, como este Poema que no conjuga con su esencia tan pura, tan "puerta de vidrio"..y .pesan en lo pecho los sentimientos con las milles de tonalidades de la puesta del astro rey, desde que irrompe su nacer....en lo Poema se senten las regularidades a lo alcanze curto (?) de la voz y las irregularidades del silencio aun más curto, que tanto tiene a decir,....comovente y brillante !!!!
ResponderEliminar...solo tengo en mis voces vuestras voces, en mitad de ellas los silencios, reincidentes, perfectas, haciendo de latidos uniformes para dar en mis ávidas palabras esas que todos llevan, sostenidas como luces y guirnaldas, predispuestas a ser y a perecer, cuando llegue el olvido...Soy solo un amanuense, un traductor, sé decir lo que todos ya conocen, pero dejan guardado entre los folios del hacer canceroso de los días, recolecto las cláusulas del viento y las dejo en los pechos del que lee, revividas de nuevo...como agua bendita de la fuente, a la mano y al gusto del que llegue...Como tú, querida Maria, que vienes a tomar de aquí, de esta agüita de vida...Gracias por venir, abrazos...
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